Sin importar donde te encuentres, los platos típicos simbolizan la expresión culinaria por excelencia de cada país del mundo. Al igual que los rasgos étnicos y culturales, la gastronomía forma parte de la identidad de cada ser humano, por lo que no puedes desvincularte de ella vayas a donde vayas. 

¿Estás pensando en sorprender a tus comensales con un menú de comida típica? Entonces continúa en este artículo, donde te mostraremos las recetas más representativas de 3 continentes, así como también su historia y origen. 

Platos típicos de Asia

Reconocidos por su alto valor nutritivo, los platos típicos de Asia poseen sabores inigualables que se combinan con presentaciones elegantes y sofisticadas. Entre las recetas típicas de esta región podemos encontrar: 

Pad Thai

¿Qué mejor manera de visibilizar la cultura de un país que conquistando paladares? Así precisamente nació el Pad Thai, un plato creado a mediados del siglo XX con el objetivo de cautivar a comensales de todo el mundo, favoreciendo así la expansión de las tradiciones tailandesas. 

El origen de esta receta coincidió en su momento con la grave crisis de la Segunda Guerra Mundial, situación que ocasionaba la escasez del alimento principal en Tailandia: el arroz. Ante esto, el Pad Thai puso sobre la mesa la alternativa de los fideos de arroz, cuya adquisición era mucho menos complicada. 

Procedimiento:

Preparar un buen Pad Thai para 2 personas requiere de solo 45 minutos. Para ello deberás tener a mano: 

  • 100 gramos de brotes de soja
  • La parte verde de una cebolleta
  • 2 chalotas
  • 150 gramos de fideos de arroz
  • 1 huevo
  • Agua
  • 25 gramos de cacahuetes
  • 1 lima 
  • 10 langostinos
  • Salsa de pescado, salsa de ostras y salsa Hoisin

Lo primero que debes hacer es dejar en remojo los fideos de arroz. Mientras esto ocurre, pica la parte verde de la cebolleta junto con las chalotas y los brotes de soja. Estos ingredientes debes saltearlos en una sartén a fuego alto por 3 minutos.

A continuación, pela los langostinos y doralos sin cabeza hasta que obtengan un color anaranjado. Posteriormente, presiona las cabezas para extraer su coral y mezclalo con las verduras salteadas. En dicha mezcla agrega un vaso de agua junto con los fideos remojados y deja que se cocinen. Reserva los langostinos para más adelante. 

Durante la cocción de las verduras con los fideos, agrega 2 cucharadas de salsa de pescado, salsa de ostras y salsa Hoisin. Deja que el sabor se concentre por 3 minutos más. Finalmente, añade los langostinos junto con un huevo y mezcla ambos ingredientes con las verduras y los fideos. Para la presentación, puedes añadir cacahuetes tostados molidos y tiras de cebollino al gusto. 

Platos típicos de Europa

En Europa, la tradición culinaria se caracteriza por ofrecer una gran variedad de sabores, los cuales vienen acompañados de ingredientes y presentaciones poco convencionales. Como seguramente te imaginas, entre las recetas típicas de Europa más solicitadas actualmente se encuentra la paella. 

Paella

Con casi 3 siglos de historia, la paella fue creada como uno de los primeros platos autóctonos luego de la llegada del arroz a España. Con el cultivo de este cereal proveniente de Asia, diversos pobladores de la región de Valencia dieron inicio a la preparación de la receta, la cual fue documentada por primera vez en el siglo XVI. 

Pese a que este plato ya era conocido desde entonces, no fue hasta 1960 que su sabor logró expandirse a todos los rincones de España y el mundo. Aunque en sus inicios fue conocido como arroz a la valenciana, actualmente se le suele llamar paella, palabra que proviene del dialecto valenciano y que significa sartén. 

Procedimiento:

Preparar una paella para hasta 4 personas lleva su tiempo. Sin embargo, se trata de una receta que vale cada segundo invertido. Para realizarla, solo debes tener a mano: 

  • Aceite de oliva virgen extra
  • Sal
  • 250 gramos de arroz bomba
  • Medio kilo de pollo
  • 250 gramos de conejo
  • 180 gramos de judías verdes
  • 100 gramos de garrofón
  • 200 gramos de tomate
  • 3 hígados de pollo
  • Pimentón dulce al gusto
  • 1 cucharadita de azafrán
  • 2 ramas de romero
  • Agua
  • Colorante amarillo (opcional)

Comienza cocinando la carne de pollo y conejo. Para ello, vierte aceite de oliva y sal en tu paellera y luego agrega la carne. Durante la cocción, recuerda agregar también los hígados de pollo. Añade una pizca más de sal y sofríe hasta que todo esté bien dorado. 

A continuación, añade el garrofón (previamente hidratado durante la noche anterior) y también las judías verdes sin puntas, preferiblemente cortadas en tres trozos. Una vez incorporados estos ingredientes, agrega un poco de sal y continúa sofriendo. 

Ahora es momento de agregar el tomate rallado junto al azafrán y el pimentón dulce. Recuerda seguir removiendo para evitar que se queme. Una vez hecho esto, añade agua hasta alcanzar los remaches de las asas e incorpora el romero cuando comience a hervir. 

Luego de 25 minutos de hervor, agrega el arroz y déjalo cocinar durante otros 18 minutos. 5 minutos a fuego alto y 13 a fuego bajo. Al completar el tiempo estará lista para servir, acompañada por supuesto de un buen vino

Platos típicos de América

Desde el sur hasta el norte, América concentra las expresiones culinarias más diversas. Su tradición gastronómica, enriquecida con el aporte de múltiples culturas, garantiza una experiencia única para paladares exigentes.

Actualmente, entre sus recetas típicas destaca:

Mole poblano

Aunque existen varias versiones sobre el origen de este plato, la más conocida hace referencia al Convento de Santa Rosa en México, donde en 1681 Sor Andrea de la Asunción descubrió la receta por inspiración divina, ocasionando que la madre superiora rompiera el voto de silencio para alabar su aroma. 

Desde 1991, el mole y sus diferentes versiones son reconocidas en toda la nación azteca, a través de festivales y talleres gastronómicos que enaltecen la singularidad del plato. Asimismo, su receta es reconocida en toda América y Europa, donde ya se le conoce como un gran representante de la cocina mexicana. 

Procedimiento:

Aunque realizarlo no es tarea fácil, el mole poblano es uno de los mejores platos para comidas familiares, pues su preparación alcanza fácilmente para más de 8 comensales. Si deseas aventurarte en su elaboración, aquí te mostramos sus ingredientes: 

  • 1 pollo entero cortado en partes
  • 225 gramos de chile mulato
  • 200 gramos de chile ancho
  • 115 gramos de chile pasilla
  • 85 gramos de ajonjolí
  • 85 gramos de cacahuetes 
  • 1 pieza de pan duro
  • 200 gramos de manteca
  • 1 tableta de chocolate
  • 2 chiles chipotle 
  • 500 gramos de tomate 
  • 250 gramos de cebolla
  • 6 dientes de ajo
  • 2 cebollas
  • 1 tortilla de maíz
  • 1 cucharadita de anís
  • 5 clavos de olor
  • 1 rama de canela
  • 4 litros de caldo de pollo
  • 85 gramos de almendras
  • 1 puñado de pasas
  • Sal y pimienta

Una vez que hayas reunido todos los ingredientes, lo primero que debes hacer es hervir el pollo y agregar en el agua una cebolla y dos dientes de ajo. Posteriormente, lava y pica los chiles para ponerlos a sofreir con manteca en una sartén. 

En otra sartén tuesta el ajonjolí, y posteriormente fríe con manteca las almendras, las pasas y los cacahuetes. En este sofrito añade la pimienta, la canela, el anís y los clavos de olor. Cuando hayas finalizado este sofrito, reserva la mezcla y a continuación asa los tomates junto a 4 dientes de ajo y una cebolla. 

En una licuadora o procesador, agrega todos los ingredientes sofritos, incluyendo los chiles y los tomates. Licúa la mezcla, pásala por el colador y devuelve los residuos a la licuadora para continuar moliendo. A este licuado añade también tortillas de maíz y una pieza de pan duro. Puedes facilitar el proceso integrando el caldo del pollo que herviste al principio. 

Una vez que hayas terminado de moler los ingredientes, vierte la salsa resultante en un cazo y mantenla a fuego medio por 40 minutos. Durante ese tiempo debes removerla constantemente para evitar que se pegue en el fondo.

Finalmente agrega chocolate y sal y pimienta al gusto. Continúa removiendo por 20 minutos más y después integra a la salsa el pollo cocido al inicio. La presentación de este plato puedes acompañarla con arroz, frijoles o tortillas. 

 

Si llegaste hasta aquí, estamos seguros de que este artículo ha aumentado tus expectativas con respecto a los platos típicos internacionales. Recuerda que el secreto de un buen restaurante está en conquistar a sus comensales, así que no lo pienses más y aventúrate en el maravilloso mundo de la cocina típica mundial.